Lo bueno se hace esperar, dicen… Casi daban las 12 de la noche del pasado viernes cuando el nombre de Cristina GarcÃa retumbaba en la gran pantalla de la pasarela de SIMOF. Dos horas después de lo previsto, empezó a sonar lo que serÃa la cabecera de ‘Contigo’, nombre que he recibido la colección de esta edición de la diseñadora de Viso del Alcor.
Sin lugar a dudas, ‘Contigo’ era una de las colecciones más esperadas de esta edición debido al buen sabor de boca que Cristina GarcÃa nos dejó el pasado año en sus trajes de flamenca. TenÃa la responsabilidad de dejarnos esa emoción en el cuerpo que un año atrás habÃamos sentido, y por supuesto, la diseñadora no perdió la oportunidad de demostrarnos una vez más su profesionalidad, su talento…
PodrÃa hablaros de los tules, de las aplicaciones, de las preciosas y llamativas tonalidades de los trajes de flamenca que conquistaron a todos los allàasistentes. Pero lo cierto, es que a pesar de que este blog reside en eso, en esta ocasión no es con lo que me quedo. Me quedo con la magia de cada diseño, con el trabajo de cada volante, con el sentimiento que cada uno de los trajes de flamenca llevaba intrÃnseco y con el recuerdo a su hermano.
Definitivamente, la espera mereció la pena. Los convencionalismos se quedaron a un lado y la originalidad, la innovación y una mezcla de sentimientos encontrados se dieron lugar en una misma colección que podrÃa valorar como una de las mejores de esta edición de SIMOF, si no la mejor.
Nos hiciste disfrutar, nos hiciste querer más y nos hiciste querer estar ‘Contigo’.
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